PRENSA

Miércoles, Septiembre 27, 2017

Miércoles, Septiembre 27, 2017

Escogió neumología porque un médico recién llegado de Estados Unidos le habló de aunar la investigación y el conocimiento científico con el natural humanismo en la práctica de la medicina. De ese mentor que fue el Dr. Vicente Marco también debió aprender a ser humilde: se siente orgulloso de todos aquellos médicos que han trabajado con él y que han crecido profesionalmente. 

Miércoles, Mayo 31, 2017

Miércoles, Mayo 31, 2017

Se inventó el Premio Médico-Médico al médico asistencial que, desde 2013, concede SEPAR en la ceremonia de clausura de su Congreso. Le despidieron dos veces del Hospital Universitari Vall d’Hebron, durante el franquismo, claro. La primera vez por solidaridad con los residentes del psiquiátrico de Conjo (Galicia) y la segunda tras el despido masivo de residentes en los hospitales españoles .

Su vida profesional ha estado siempre ligada a SEPAR, a las Áreas de Circulación Pulmonar y TIR. En su etapa como director de la revista Archivos de Bronconeumología, (1992-2000), se propuso modernizarla e indexarla lo que consiguió y abrió el camino para ser admitida en el Science Citation Index. Archivos pasó de ser una revista modesta a ser “la voz científica de SEPAR y después de ALAT y la AIACT ”, según sus  palabras. En 2009 fue elegido “presidente electo” de SEPAR.

Se apuntó en SEPAR siendo R1. El profesor Monturiol se lo dijo. Al principio la trataba de Usted y ella le admira. Fue mi maestro, casi confiesa con voz queda. Corría el año 78. No eran tiempos fáciles para nadie, apostilla. De ahí que se quedara con que hay que ayudar a los residentes. Asistió al primer Congreso de SEPAR en el 81 y descubrió que allí había gente joven muy revolucionaria, comenta con cierta sorpresa.

SEPAR no existía cuando se hizo médico en 1960; existía la  la sección española de la AIEB (SE-AIEB), creada en 1954 y cuyo primer presidente fue el Dr. Manuel Tapia. En 1966 empezó a trabajar en fisiopatología respiratoria en una plaza del Departamento Central de Exploración Cardiopulmonar del Hospital Clínico de Madrid. SEPAR seguía sin existir y la neumología tampoco.

No fundó SEPAR pero casi: contribuyó decididamente al despegue de SEPAR en los años 70. El Dr. Albert Agustí Vidal, que fue su jefe en el Hospital Clínic de Barcelona, mientras el Dr. Picado era residente, sí que fue uno de los fundadores de la Sociedad científica. Se llevaban unos 25 años. Dos generaciones diferentes pero un propósito común: trabajar para el desarrollo de la neumología y el conocimiento de las enfermedades respiratorias.